jueves, 31 de mayo de 2007

RELIGIOSIDAD Y CREENCIAS SEGUNDA PARTE

La luna tiene una relación directa con el rito, el tiempo, el cocimiento, la fecundidad y las normas que rigen el comportamiento de los indígenas wayuu.
La luna tiene gran influencia en la cultura wayuu.
Teniendo en cuenta sus fases, se habla del periodo menstrual y se cuentan las lunas en el embarazo.
Se hablan de los meses lunares
Con la luna, la noche, los fenómenos naturales en general, están vinculadas sus tradiciones y creencias. A partir del sol, la luna y las estrellas se determinan el tiempo: el día, el mes y las estaciones.

PICHIKUA (EL VIENTO) Y PALAA (MAR)
Mitológicamente pichikua es uno de los mellizos es decir uno de los hijos de wolunka primera mujer creada por maleiwa, es el envidioso y egoísta, que al final mata a su hermano para quedarse con todo lo que había en la tierra. El mismo pichikua le comento a su madre la muerte de su hermano, como wolunka quería tanto a su hijo se murió de tristeza.
Maleiwa como lo sabe todo un día le dijo en un sueño a pichikua, jamás tendrá descanso en tu vida, andarás por el mundo vagando sin destino.
Pichikua la verse tan solo se tiro del mismo cerro y se mato; por eso hoy en día su alma errante por toda la península de la guajira.
La palabra PICHIKUA etimológicamente es: PICHI vine de tepichi, que es niño. KUA viene de sukua, que es paso o movimiento al andar. Pichikua quiere decir, como le paso del niño.


ORIGEN DE EPICHIKUA
Andando en WALATCHI (calor) por el mundo, vio a Mma que dormía profundamente bajo unas arboledas. El genio del calor, al verla tan hermosa de paso la beso y le inflamo las entrañas con el fuego de su pasión. Cuando Mma se despertó, ya estaba encinta, pero ella ante aquel atrevimiento, aborto le fruto de su vientre y lo dejo abandonado en un extenso arenal poblado de hormigas bravas, para que estas las devorasen. Entonces las arenícolas llamadas chime´e (larva de hormiga león), al ver el peligro que corría el recién nacido, hicieron sus hoyuelos de arena en derredor de la criatura para protegerla de las hormigas. Desde entonces las chime´e se encargaron de cuidarlo con esmero. Cuando pichikua creció salio en busca de miel de avispa para comer, por el camino se les apareció un hombre de rostro sonreído y le pregunto:
- ¿a donde vas, muchacho?
- Le contesto a buscar un panal de avispas que tenga miel. Entonces le dijo señalando un cerro:
- ¿ves aquella colina? Pues esa se llama JOUTALIN, en ella puedes encontrar bastante miel de matajey. Encamínate allá y veras que es cierto lo que os digo. El niño se dirigió a joutalin; pero cuando llego a ella sintió que dentro de una enorme cueva alguien tocaba un TALIRAI (instrumento musical).
Pero aquello no era tal cueva, sino la boca de gigante que se lo trago sin darse cuenta.
Pichikua extraviado comenzó a caminar en el estomago del gigante quien eructaba fuertísimo ventarrones, se dice que estaba borracho de IMEMA
Pichikua entre aquella desesperante situación comenzó a gritar pero nadie escuchaba sus lamentos.
Entonces palaa, en una de sus grandes furias contra mma, inundo las llanuras, los montes y los cerros. El gigante no tuvo escapatoria y quedo sepultado entre las aguas convirtiéndose en un islote de piedra.
Cuando el gran palaa se dio cuenta que dentro de la barriga del gigante había un niño, se lleno de regocijo lo tomo entre sus brazos, lo envolvió con su manto y lo meció en su hamaca, pero pichikua, como era muy travieso le dijo no me arrulléis en vuestros brazos ni me deis vuestra hamaco por morada, porque tengo miedo que me dejéis caer en el suelo de vuestro abismos.
Y… diciendo esto, el niño salto de la hamaca y se fue corriendo mas, como era muy chiquitico palaa no pudo verlo cuando huyo, palaa lo busco por todas partes.
Ya fuera de peligro, se revolcó en el suelo en medio de grandes carcajadas, se ventoseo, tomo un puñado de arena y lo soplo en su pecho. Luego tras la risa que la embargaba comenzó a bailar y a revolver con sus pies el polvo de la tierra.
Pichikua se burlaba de mma y de palaa cuando fue convertido en un suave remolino que jugueteaba sobre la arena. Desde entonces, en los días calurosos de verano pichikua se presenta como el viento juguetón que pasa sobre la tierra.
Pichikua es como un duende que en cualquier parte se aparece arrastrando en su carrera, una tenue brisa.

PALAA (MAR)
Es la extensión de agua salada. Palaa se traduce literalmente: salada y por consiguiente, es hija de la gran madre del viento y las lluvias.
Mitológicamente palaa es hija de la gran madre AIPA (noche) para mayor claridad es la gemela de la gran madre tierra


SIKII (ORIGEN DEL FUEGO)
Solo el gran padre Maleiwa, poseía el fuego, los hombres pasaban frió y no podían cocinar sus alimentos; los comía crudo o los secaban al sol.
Junuunai: era un joven wayuu muy vivaracho y un día decidió ir en busca de Maleiwa para conseguir el fuego. El joven subió hasta itojor, y encontró al gran padre calentándose junto a la hoguera, el fuego era semejante a los fulgores áureos del cielo. Junuunai deslumbrado por la maravilla del fuego, sintió que sus huesos se calentaban y llenando su boca de halagos hacia el gran padre le rogó que le dejara permanecer esa noche junto al fuego.
Maleiwa mostraba indiferencia ante tantos halagos pero el joven poco a poco fue captando la tensión de maleiwa y logro distraerlo de su vigilia del fuego. Y en un descuido del gran padre robo dos brazas y las metió en su bolso.
Maleiwa se dio cuenta de la jugada de Junuunai y enfurecido comenzó a perseguirlo, en su huida el joven se encontró con un cazador llamado KENAA; pero al anochecer el gran padre vio la braza y descubrió al cazador, enfurecido Maleiwa castigo a Kenaa y lo convirtió en cocuyo para que eternamente iluminara las noches oscuras y frías.
Seguidamente continuo su persecución, Junuunai en su carrera de escape se encontró con JINULU cigarrón y le entrego la otra braza para que la escondiera y este la guardo en un palo de caujaro, luego la paso a un palo de olivo, a otro palo y así sucesivamente hasta que el fuego se propago, Maleiwa por fin le dio alcance a Junuunai y con mucha furia lo convirtió en escarabajo para que se alimentara de excrementos, pero el gran padre no recupero la segunda braza y siguió en la búsqueda.
Un niño llamado Serüma jugaba en el bosque y al treparse a un árbol de caujaro encontró en el fuego, corto varias varitas del árbol y se fue hasta donde estaban los hombres, al llegar ante ellos se los enseño: froto con sus manos dos varitas de caujaro y de ella surgió el fuego, los hombres aprendieron a hacerlo y obsequiaron muchas brazas a otros hombres, así extendieron miles y miles de brazas.
Maleiwa al saber lo que había hecho SERUMAA se enfureció mucho más y lo convirtió en sikuyuu pájaro que canta ¡sikii! ¡Sikii! ¡Sikii! ¡Sikii!. Fuego, fuego, fuego.

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